La planta está en el partido bonaerense de General Las Heras, es un ciclo 1 y 2, es decir, se va a faenar y despostar la media res. Allí se va a brindar el servicio de faena a operadores que quieran vender para el mercado interno pero sobre todo a exportadores. “Si Dios quiere lo estamos terminando en octubre o noviembre de este año”, dijo Daniel Fenoglio, presidente de Cabaña Argentina, quien contó que va a tener un capacidad de faena que duplica a la producción de empresa. En esa planta se podrán procesar cerca de 50.000 capones al mes. Luego de la faena viene lo más complicado: “Los cuellos de botella están en el desposte, digamos, en el despiece del animal, que es mucho más lento y más específico. Más aún ahora también en la Argentina hay mucha carencia de congelado, es decir, no se puede congelar ese producto. Hay que mandarlo a congelar afuera. Muchas veces no hay cupos de congelamiento. En este frigorífico se va a poder hacer todo el ciclo: faena, desposte y congelado de toda la producción”, dijo Fenoglio. Fuente: Bichos de Campo