Por: Lic. Amalie Ablin*. Licenciada en Ciencia Pol&iacute;tica (Universidad del Salvador, Buenos Aires). Postgrado Programa de Capacitaci&oacute;n Ejecutiva en Agronegocios (Universidad de San Andr&eacute;s, Buenos Aires). Fotos: Banco de im&aacute;genes Se entiende por valor a&ntilde;adido el conjunto de caracter&iacute;sticas adicionales del producto o servicio que se ofrece que hacen que sea m&aacute;s atractivo para el cliente frente a la competencia. Es, en definitiva, aquello que se le da de m&aacute;s en un producto, aunque no sea necesario, ayudando al consumidor a elegir una marca determinada. Por ello nos preguntamos, &iquest;c&oacute;mo agregamos valor? Elaborando un producto &ldquo;hecho a la medida&rdquo;: es el cl&aacute;sico de cumplir con las necesidades o requerimientos espec&iacute;ficos del cliente, &iquest;qu&eacute; quiere y c&oacute;mo? Desea productos marinados, adobados, empanados, crudos, precocidos, cocidos, congelados, etc. Ofreciendo productos &ldquo;diferenciados&rdquo;: son productos que nos van a distinguir de la competencia y nos van a colocar en un nicho de menor volumen, pero de mayor valor, por ejemplo: alimentos org&aacute;nicos, con ingredientes naturales, artesanales, sustentables, criado localmente, bajos en sodio o grasa, libres de gluten, etc. Consecuentemente, &iquest;c&oacute;mo se hace? Por medio de: Productos listos para consumir: es decir alimentos que podamos comer a cualquier hora del d&iacute;a, que sean sabrosos y en empaques atractivos. Conveniencia: queremos alimentos que sean f&aacute;ciles y r&aacute;pidos de preparar, con un mayor control en la elaboraci&oacute;n. Alimentos m&aacute;s saludables: menos grasa, menos sodio, m&aacute;s fibra, que&nbsp; fortalezcan nuestro sistema inmunol&oacute;gico. Variedad de formas: con respecto particularmente a la carne, ya no se quieren solamente cortes o filetes, sino encontrar tambi&eacute;n carne fresca en cubitos, tiritas, fajitas, medallones, rebanadas y los mismo para carnes cocinadas, en forma de deshebradas de res, cerdo o pollo listas para sazonar. Envases individuales: hay muchas personas viviendo solas, por lo que conviene contar con alimentos porcionizados as&iacute; como en porciones peque&ntilde;as que sean f&aacute;ciles de transportar para viajes, guardar en el escritorio, para enviar el almuerzo, etc. Variedad de sabores: queremos variabilidad en nuestra dieta para no repetir la misma comida semana tras semana, por ello las personas est&aacute;n dispuestas a lanzarse a probar alimentos de otros pa&iacute;ses, fusionarlos y experimentar. <p style="text-align: center;"> Para cumplir con todas estas demandas es necesario que se desarrollen una gran variedad de alimentos con valor agregado y es, precisamente en ese punto, donde los diferentes sabores, texturas y apariencias que el productor de alimentos pueda ofrecer, generan la clave para el desarrollo de productos innovadores y exitosos. Innovar como estrategia El tema de la innovaci&oacute;n como estrategia para conquistar y permanecer en nuevos mercados con productos novedosos se encuentra ampliamente difundido entre quienes desean moverse con celeridad en una realidad cambiante, de consumidores que tienen necesidades diversas, y nichos comerciales de los m&aacute;s variados. Abarca toda acci&oacute;n que mejora la relaci&oacute;n con los alimentos, en los m&aacute;s diversos aspectos y caracter&iacute;sticas, alcanzando tanto al dise&ntilde;o del producto comestible en s&iacute; como a su contexto, incluyendo procesos, objetos, espacios, todos ellos involucrados desde la producci&oacute;n hasta el consumo final.&nbsp; El alimento puede ser visto como un objeto de investigaci&oacute;n, para analizar c&oacute;mo las transformaciones sociales est&aacute;n cambiando su uso y su consumo, y tambi&eacute;n observado con la finalidad de lograr soluciones innovadoras que faciliten desarrollar nuevos productos para nuevas demandas de mercado, permitiendo descubrir problemas de configuraci&oacute;n, por ejemplo, a la hora del transporte o en el momento de manipularlo para ingerirlo. El dise&ntilde;o puede realizar su aporte para resolver estos problemas de utilizaci&oacute;n con soluciones que faciliten la actividad alimentaria. Detectarlos y contribuir a incorporarlos al mercado local y -por qu&eacute; no- al global, es un desaf&iacute;o prometedor que puede abrir las puertas para obtener mejores productos destinados a un mercado cada d&iacute;a m&aacute;s exigente y &aacute;vido de propuestas nuevas. Los productos c&aacute;rnicos ideales podr&iacute;an potenciarse aprovechando la variedad de materias primas, el &ldquo;saber hacer&rdquo; y la experiencia en materia de los alimentos que posee la Argentina. *Las opiniones vertidas son de exclusiva responsabilidad del autor y no comprometen a la instituci&oacute;n en la cual se desempe&ntilde;a.